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El cuarto Obispo de Chilapa, Monseñor Ramón Ibarra y González, concibió la idea de construir una Catedral de grandes dimensiones «de acuerdo con la grandeza del lugar». Ordenó el trazo de una catedral que se pareciera a la de Puebla de los Ángeles, cuyo diseño se debió al grandilocuente Gómez de la Mora, aún cuando algunos autores afirman que se debe al célebre Juan de Herrera, autor de El Escorial de España.

La base es de estilo basilical románico: nave central, dos naves procesionales y dos naves costales. La base es de cantería rosa y verde, hasta una altura de cinco metros (hoy ha sido cubierta de mármol).

Cuando en 1930 se quemó la antigua Catedral, el recién consagrado Obispo de Chilapa, Dr. Leopoldo Diaz Escudero, se decidió a continuar la construcción de la Catedral; para eso trajo al Dr. Arquitecto D. Fererico Mariscal, quien de inmediato se dió a la tarea de replantear la Catedral, adoptó lo que ya estaba construido, al estilo gótico pero moderno sin la ojiva primitiva, sin parábolas encontradas en la cúspide, sino todo rectilíneo: la paredes elevadas ligadas por contrafuertes esbeltísimos, rematan en hermosas agujas que taladran el empíreo, Tiene también en el centro, en el corazón del edificio, en la base, una gran cruz de estilo bizantino, formada por la nave mayor y los pasillos de los costados que marcan las salidas al este y oeste y en el centro de la inmensa cruz, cae la cúpula de estilo neoclásico.

El frontis tiene puertas enormes: símbolo de la Santísima Trinidad; la puerta central es de tipo abocinado. En la parte superior está el rosetón estilizado y es cuadrangular a diferencia de los medievales que fueron circulares; éste es el ojo de Dios para el cual no hay nada oculto.

En los laterales hay unas Hornacinas o cosa parecida que sirven de soporte a las estatuas de Santos no muy góticos. La parte superior del frontis remata con una ojiva en forma de frontón en cuya cúspide colocaron la estatua de San Miguel Arcángel patrono de la ciudad, talla estilo bizantino, obras del gran escultor chilapense Alfonso Casarrubias Parra.

A los extremos del frontispicio están las torres enormes; son los brazos formidables, extraordinariamente gigantescos que lanzan sus plegarias al padre en actitud constante de oración; las torres son de estilo gótico inglés moderno; esbeltas, altisimas, tienen el ajimez clásico del estilo y lo único curvilíneo es el manojo de columnitas que tienen en el último campanario, con un remate piramidal que sirve de peana a una cruz achaparrada.

Desde que se tramonta el umbral se nota y se goza de la arcada flamígera que nos va llevando más y más hacia lo alto en afán perene de ascensión; y es que «este estilo nació cuando Europa estaba ardiendo en amor, pero en amor divino» como jamás ha sucedido en la historia. Hay dieciséis capillas en donde se pueden admirar los vitrales y hermosas esculturas.

La Concatedral de Chilapa, dedicada a la Virgen de la Asunción, es el principal templo católico de la ciudad de Chilapa, en el estado mexicano de Guerrero y el segundo de la diócesis de Chilpancingo-Chilapa desde el año de 1990.