Boletín Diocesano 03 año 1

Boletín Diocesano 03 año 1.- Jubileo de los Artistas y del Mundo de la Cultura
“El arte reaviva la esperanza”

15 a 18 de febrero

Participantes

Un encuentro verdaderamente global que reúne a más de siete mil miembros, provenientes de más de 60 naciones de los cinco continentes”.

El patrimonio cultural, el arte y la esperanza

El cardenal Tolentino de Mendonça, Prefecto del Dicasterio para la Cultura y la Educación ha dicho: «La esperanza es una experiencia antropológica global, que late en el corazón de cada cultura y que da a todos la posibilidad del diálogo… “Debemos preguntarnos cómo el patrimonio cultural de las religiones puede ser un transmisor más activo de esperanza hacia las nuevas generaciones” y cómo “el arte contemporáneo puede transmitir esperanza”.

Un manifiesto didáctico

Durante los días de este Jubileo temático, los participantes serán invitados a pasar por la Puerta Santa – en la tarde del domingo 16.

El sábado 15 de febrero participaron en el encuentro internacional Compartiendo la esperanza – Horizontes para el patrimonio cultural.

Organizado en colaboración con los Museos Vaticanos, el evento reunirá a los responsables de algunas de las instituciones artísticas y museísticas más prestigiosas del mundo que exploraron nuevos lenguajes y estrategias para la valorización y transmisión del patrimonio religioso y artístico.

El diálogo desembocó en la firma de un Manifiesto educativo sobre la transmisión de los códigos religiosos, de la tradición, de la fe y del arte mismo.

Más información:

https://www.vaticannews.va/es/vaticano/news/2025-02/el-arte-reaviva-la-esperanza-presentado-el-jubileo-de-artistas.html
https://www.iubilaeum2025.va/es/pellegrinaggio/calendario-giubileo/GrandiEventi/Giubileo-degli-Artisti.html

20 de febrero: Día Mundial de la Justicia Social (ONU)

Finalidad

Se celebra con la finalidad de concienciar a la población y de impulsar acciones orientadas a que exista mayor justicia social.

Se pretende sobre todo erradicar la pobreza y promover el empleo pleno y el trabajo decente; la igualdad entre los sexos, el acceso al bienestar social y la justicia social para todos.

Origen del Día Mundial de la Justicia Social

Fue proclamado el 26 de noviembre de 2007, por la Asamblea General de las Naciones Unidas.

Para la Organización de las Naciones Unidas, la búsqueda de la justicia social universal representa el núcleo de su misión.

En un mundo en el que la economía afecta directamente a los sistemas ecológicos de subsistencia, hay que trabajar para que la justicia social sea una realidad. El crecimiento económico no tiene sentido si no redunda en el bienestar real y sostenible.

¿Qué es la Justicia Social?

El concepto de Justicia Social se basa en la defensa de la igualdad de oportunidades, lucha contra la discriminación y defensa de los derechos de todas las personas. Va más allá de la justicia legal.

Todas las personas debemos tener acceso al disfrute de los derechos humanos fundamentales: el derecho a la identidad, a la supervivencia, a la expresión con libertad, a la educación, entre otros derechos, así como a ser tratados con respeto y dignidad.

La Justicia Social promueve los derechos y las obligaciones de las personas que forman parte del colectivo social de manera igualitaria, justa y equilibrada.

Tareas de la Doctrina Social de la Iglesia

Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, 81

Ante todo, el ANUNCIO de lo que la Iglesia posee como propio: «una visión global del hombre y de la humanidad», en un plano no sólo teórico, sino práctico. La doctrina social, en efecto, no ofrece solamente significados, valores y criterios de juicio, sino también las normas y las directrices de acción que de ellos se derivan. Con esta doctrina, la Iglesia no persigue fines de estructuración y organización de la sociedad, sino de exigencia, dirección y formación de las conciencias.

La doctrina social comporta también una tarea de DENUNCIA, en presencia del pecado: es el pecado de injusticia y de violencia que de distintas maneras afecta a la sociedad y en ella toma cuerpo.

120 Esta denuncia se hace juicio y defensa de los derechos ignorados y violados, especialmente de los derechos de los pobres, de los pequeños, de los débiles.121 Y es tanto más necesaria esta denuncia cuanto más se extiendan las injusticias y las violencias, que abarcan categorías enteras de personas y amplias áreas geográficas del mundo, y dan lugar a cuestiones sociales, es decir, a abusos y desequilibrios que agitan las sociedades. Gran parte de la enseñanza social de la Iglesia es requerida y determinada por las grandes cuestiones sociales, para las que quiere ser respuesta de justicia social.

Todos somos responsables del bien común

Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia

166.- Las exigencias del bien común derivan de las condiciones sociales de cada época y están estrechamente vinculadas a la promoción de la persona y al reconocimiento, promoción y garantía de sus derechos fundamentales.349 Estas exigencias se refieren, ante todo, al compromiso por la paz, la organización de los poderes del Estado, a la existencia de un sólido ordenamiento jurídico, la salvaguardia del ambiente, a la prestación de los servicios esenciales de las personas, algunos de los cuales son, al mismo tiempo, derechos del hombre: alimentación, vivienda, trabajo, educación y acceso a la cultura, transporte, salud, libre circulación de informaciones y tutela de la libertad religiosa. Todo ello, sin olvidar el deber de las naciones en la edificación de relaciones de cooperación internacional al servicio de la promoción del bien común universal.

167.- El bien común compromete es un deber con el que deben cumplir todos los miembros de la sociedad: de acuerdo a sus capacidades, nadie puede sustraerse a él. El bien común debe perseguirse en su plenitud y no según visiones reductivas subordinadas a la lógica de los beneficios particulares. El bien común es expresión de las inclinaciones más elevadas de los hombres , porque requiere la búsqueda constante del bien de los demás como si fuera propio. Todos tienen el derecho a disfrutar de las condiciones de vida que resultan de la promoción del bien común. En este sentido, sigue siendo actual la enseñanza de Pío XI: «A cada cual, por consiguiente, debe dársele lo suyo en la distribución de los bienes, siendo necesario que la participación de los bienes creados se revoque y se ajuste a las normas del bien común o de la justicia social, pues cualquier persona sensata ve cuán gravísimo trastorno acarrea consigo esta enorme diferencia actual entre unos pocos cargados de fabulosas riquezas y la incontable multitud de los necesitados».

22 de febrero: Fiesta de la Cátedra de San Pedro

La cátedra (o sede) de un obispo se levanta en la catedral y es la señal de su autoridad de maestro, sacerdote y pastor. Esta cátedra de san Pedro nos recuerda la misión confiada por Cristo al apóstol san Pedro. Pedro es la garantía de la fe de sus hermanos.

31 Simón, Simón, mira que Satanás ha pedido poder para zarandearlos como el trigo, 32 pero yo he rogado por ti, para que no te falte la fe. Y tú, después que hayas vuelto, confirma a tus hermanos» (Lc 22,31-32).

Pedro, por su fe, es la roca sobre la cual el Señor ha construido su Iglesia:

«Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi iglesia, y el poder de la Muerte no prevalecerá contra ella. Yo te dará las llaves del Reino de los Cielos. Todo lo que ates en la tierra, quedará atado en el cielo, y todo lo que desates en la tierra, quedará desatado en el cielo» (Mt 16,18-19).

El Catecismo de la Iglesia Católica dice:

891 «El Romano Pontífice, cabeza del colegio episcopal, goza de esta infalibilidad en virtud de su ministerio cuando, como Pastor y Maestro supremo de todos los fieles que confirma en la fe a sus hermanos, proclama por un acto definitivo la doctrina en cuestiones de fe y moral […] La infalibilidad prometida a la Iglesia reside también en el cuerpo episcopal cuando ejerce el magisterio supremo con el sucesor de Pedro», sobre todo en un Concilio Ecuménico (LG 25; cf. Vaticano I: DS 3074). Cuando la Iglesia propone por medio de su Magisterio supremo que algo se debe aceptar «como revelado por Dios para ser creído» (DV 10) y como enseñanza de Cristo, «hay que aceptar sus definiciones con la obediencia de la fe» (LG 25). Esta infalibilidad abarca todo el depósito de la Revelación divina (cf. LG 25).

EL JUBILEO: TIEMPO PARA PEDIR PERDÓN

Guión para un Examen de Conciencia Sobre las bienventuranzas

1 La pobreza y el Reino

Dice Jesús: Dichosos los pobres en el espíritu, porque de ellos es el Reino de los cielos.

– ¿Es Dios y su Reino la cosa más importante de mi vida? ¿El objetivo de mi vida es seguir el Evangelio de Jesús, aunque a veces no me resulte fácil?

– ¿Confío en Dios por encima de todo, y me sostengo en él, especialmente cuando me resulta difícil ser fiel al Evangelio?

– ¿Deseo y trabajo por el bienestar de todos, especialmente de los necesitados? ¿Vivo austeramente? ¿Comparto mis bienes con los que tienen menos que yo?

2 El sufrimiento

Dice Jesús: Dichosos los sufridos, porque ellos heredarán la tierra.

– Sea cual sea mi situación, ¿procuro vivir en paz en mi interior, y transmitir paz a mi alrededor? ¿Intento tomarme los problemas con espíritu positivo, y sin crear angustias innecesarias a los que me rodean?

– ¿Soy sencillo? ¿Sé reconocer mis limitaciones? ¿Sé aceptar que no tengo siempre la razón? ¿Estoy dispuesto a aprender de los demás?

– ¿Soy amable? ¿Soy agradecido? ¿Me preocupo por hacer la vida más fácil y agradable a los demás?

3 El dolor

Dice Jesús: Dichosos los que lloran, porque ellos serán consolados.

– ¿Me pongo confiadamente en manos de Dios en los dolores y tristezas?

– ¿Siento como propios los dolores y tristezas que veo a mi alrededor?

– ¿Me siento solidario de todos los que sufren, aquí y en el mundo entero, por el hambre, la guerra, la pobreza y cualquier clase de injusticia?

4 La justicia

Dice Jesús: Dichosos los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos quedarán saciados.

– ¿Me doy cuenta del mal que hay en mí? ¿Me doy cuenta de todo aquello que hago y no debería hacer, y de las actitudes que debería cambiar? ¿Me doy cuenta de todo lo que debería hacer y no hago, para vivirmás de acuerdo con la justicia de Dios?

– ¿Deseo de todo corazón que el amor, la vida y la justicia de Dios alcancen a todos y renueven nuestro mundo?

5 La misericordia

Dice Jesús: Dichosos los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia.

– ¿Hago todo lo que está en mis manos para ayudar a los que sufren? ¿Visito a los enfermos? ¿Hago compañía a los que están solos? ¿Colaboro de algún modo con entidades dedicadas a la ayuda y la solidaridad?

– Como el buen samaritano, que se acercó a ayudar a aquel desconocido que estaba allí a la vera del camino, ¿sé yo también que debo ayudar a los que necesiten mi ayuda, aunque no los conozca o incluso me caigan mal?

6 La pureza y la visión

Dice Jesús: Dichosos los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios.

– ¿Sé reconocer las cosas buenas de los demás y alegrarme sinceramente? ¿Sé reconocer las cosas buenas de los que no piensan como yo o incluso me caen mal? ¿Sé reconocer las cosas buenas de los que no son cristianos?

– ¿Voy de buena fe? ¿O bien desconfío siempre de todos y estoy convencido de que en principio es mejor pensar mal de los demás?

– ¿Intento comprender las actitudes y actuaciones de los demás? ¿Soy capaz de ponerme en la piel de los demás?

– ¿Mantengo siempre la ilusión de que las personas y las cosas pueden ser mejores, o más bien digo a menudo que no hay nada que hacer?

7 La paz y la filiación

Dice Jesús: Dichosos los que trabajan por la paz, porque ellos se llamarán hijos de Dios.

– ¿Procuro ser portador de paz a mi alrededor, o más bien a menudo provoco problemas y conflictos? Cuando estoy enemistado con alguien, o se producen tensiones, ¿hago todo lo que puedo por arreglarlo, aunque piense que la culpa es del otro?

-Cuando hay que discutir algo ¿procuro que mi aportación sea para encontrar soluciones, o más bien contribuyo a complicar las cosas y a crear mal ambiente?

– ¿Estoy atento, y me preocupan, los problemas de la paz en el mundo? Si tengo ocasión, ¿participo en actividades en favor de la paz?

8 La justicia
y el reino

Dice Jesús: Dichosos los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el Reino de los cielos.

– Aunque me pueda acarrear críticas o desprecios, ¿mantengo con firmeza las actitudes cristianas fundamentales, como son el espíritu de servicio y de entrega, la sencillez, el desprendimiento, el compartir los propios bienes, el perdón, el amor a los enemigos, la lucha contra la injusticia, la defensa de los pobres y los débiles?

– ¿Estoy contento de ser cristiano? ¿Me manifiesto cristiano, con sencillez pero al mismo tiempo con convicción? ¿Transmito la alegría de ser cristiano?

Guión para un Examen de Conciencia: Para jóvenes

1 Tu relación con Dios.

¿Lo tienes presente en tu vida? ¿Rezas? ¿Participas del gran encuentro de los cristianos, que es la Eucaristía de los domingos? ¿Te preocupas por conocer mejor tu fe y formarte adecuadamente?

2 Tus relaciones con los demás.

¿Te preocupas por el bien de los demás, o piensas sólo en ti mismo? ¿Estás dispuesto a ayudar a los demás en toda ocasión, o calculas antes tus propios intereses?

¿Sabes ceder, o quieres tener siempre la razón?

¿Eres leal con los demás? ¿Son limpias, siempre, tus relaciones? ¿Sabes transmitir confianza y deseos de seguir adelante, en lugar de amargura y pesimismo? ¿Eres generoso?

3 Tu vida de estudio o de trabajo.

¿Dedicas al estudio el tiempo y la atención necesarios?

Si trabajas, ¿lo haces también con dedicación?

Sea en el estudio o en el trabajo, ¿mantienes buenas relaciones con los compañeros?, ¿actúas siempre con espíritu solidario?

4 Tu vida de familia.

¿Haces todo lo posible para que en casa haya una buena relación entre todos y mayor felicidad? ¿Eres respetuoso con tus padres? ¿Buscas el bien de todos los que están en casa, con verdadero amor mutuo?

5 Tu preocupación por el bien común.

¿Te interesas por los problemas de los demás jóvenes, tanto los más cercanos a ti como los que pertenecen a ambientes distintos del tuyo? ¿Te interesas por los problemas de la vida social? ¿Te preocupas por lo que pasa en tu ciudad, pueblo, barrio? ¿Te preocupas por los que tienen menos posibilidades que tú?

Guión para un Examen de Conciencia: Para niños

¿Me acuerdo de Dios en mi vida? ¿Le rezo por la mañana y por la noche? ¿Quiero vivir de verdad como hijo suyo? ¿Voy a Misa todos los domingos?

¿Me porto bien en casa? ¿Quiero a mi papá y a mi mamá?

¿Les hago caso en lo que me dicen? ¿Ayudo en casa con alegría y sin protestar? ¿Quiero a mis hermanos? ¿Quiero a mis abuelos? ¿Los trato con cariño?

En la escuela, ¿trabajo en serio? ¿Hago caso de los maestros? ¿Los respeto?

¿Doy buen ejemplo a los demás compañeros? ¿Procuro no estropear el material de la clase? ¿Hago bien las tareas?

¿Soy buen compañero? ¿Estoy dispuesto a ayudar a los demás cuando lo necesitan? ¿Me preocupo de los compañeros a los que nadie hace caso ni presta atención? ¿Procuro ser puntual en la clase y crear ambiente de alegría y de trabajo?

¿Me burlo de los que no les va bien en clase, o de los que siempre pierden en los juegos, o de los que no tienen tantas cosas como yo?

— ¿Me peleo con los demás niños o niñas? ¿Quiero tener siempre la razón y que todo el mundo haga lo que a mí me gusta?

¿Tengo antipatía u odio a alguien? ¿Hablo mal de los otros niños? ¿Los insulto o les pego? ¿Digo la verdad?

¿Me he apropiado de cosas que no eran mías? ¿Digo mentiras? ¿He sido envidioso? ¿Me he creído superior a los demás?

¿Soy servicial y hago favores? ¿Comparto con los demás lo que tengo? ¿Procuro ayudar de algún modo a los pobres y a todos los que la pasan mal? ¿Procuro amar a todos comoJesús me ama?

Para los Avisos Parroquiales

+ El próximo 20 de febrero celebraremos el día mundial de la justicia social. En la página 2 se describe la finalidad y el origen de esta celebración.

+ Muchas veces pensamos que somos buenos católicos porque tenemos devoción a los santos y vamos a misa los domingos. El verdadero católico tiene tres características: conoce su fe, celebra su fe y practica el bien en la sociedad. Para ayudarnos a crecer van unas pequeñas notas sobre las tareas de la doctrina social de la Iglesia y sobre el bien común (pagina 2)

+ El Jubileo es una oportunidad para pedir perdón, para reconciliarse con Dios y con los hermanos. En la página 4 va una guía para hacer un Examen de Conciencia basado en las bienaventuranzas y en la página 5 y 6 un guión para jóvenes y otro para niños. Los invito a leerlos y tomar en cuenta esa lista de preguntas para su siguiente confesión.

Aquí puedes bajar en formato PDF el Boletín Diocesano